viernes, abril 28, 2006

otro bolero más

No fue sólo repartir comida.

No fue sólo que mi día horrible se arregló apenas entré a la casa de la Siri a pelar papas y rallar zanahorias. Tampoco que por un ratito dejé de sentir esa presión absurda en el pecho, culpa del recuerdo de una historia que no llegó jamás a todo lo que pudo ser y que quizá no deje nunca de hacerme repetir esta lista de canciones. Ni que encontré al lado del puente a Luchito, al Negro, al que cantaba en Rojo como Sergio Dalma y que sigue viviendo donde mismo, con una tele chiquitita al lado de su cama tapada con cajas de cartón.

Fue, además, que mi vida entera tuvo sentido y razón de ser cuando Miguel me dijo que Dios le había mandado un angelito. Que el poeta Guillermo entró a un curso de teatro y pintura. Que la guitarra que tocó Lucho nos hizo bailar y cantar fuerte, y dejó de hacer frío y hasta el agua del Mapocho empezó a reírse.

Fue que, por tres horas, dejé de ser mi centro.
Fue que me acordé de la cara de Cristo.
Fue la certeza de que lo tengo todo.
Fue saber que también está en mis manos.
Que el mundo puede, y debe, cambiar.

jueves, abril 27, 2006

pensar en voz alta

Ahora entiendo a Clark Kent.
La frase más célebre de Sombra en nuestro encuentro de café y tarot.
Y eso que hubo varias.

Es que durante una hora y media fue hablarlo todo, contarnos todo, matarnos de la risa y convertir un conocernos en esas típicas reuniones de amigas que no se han visto en años y no se cansan de ponerse al día.

Lo pasé muy bien.

Profundizamos en sus romances de teleserie, tomamos mocha blanco con almendras en un dos por uno que pagó ella [gracias otra vez], y estuvimos viendo las cartas y enterándonos de la vida y encontrando canciones perfectas mientras Sombra manejaba un auto azul y me traía de vuelta a mi casa.

Nos gustan las mismas películas y somos las dos medias obsesivas. Nos enamoramos de los mismos narcisistas enfermos que nos hacen llorar. Alucinamos con la banda sonora de Garden State, y eso que yo creía que nadie más la había visto.

Es un encanto de persona.
Ya ni encuentro tan freak conocer gente por internet.
Tengo una amiga nueva que escribe sin faltas de ortografía.

miércoles, abril 26, 2006

no man's woman

Once votos contra nueve.
Perdimos el debate de Información.

Como recompensa por las horas de sueño entregadas a las comisiones de Bachelet, me tomé la mañana libre y paseé por el centro. Pensaba ir al cine pero la película se atrasó y me dio lata esperar, así es que en vez de eso caminé hasta la Plaza de Armas y compré tres libros en oferta. Excelente.

Sigue haciendo calor y lo que más quiero en la vida es un poco de lluvia.

Claudio me dijo una vez, cuando todavía hablábamos y yo pensaba que podía ser el gran y único amor de mi vida, que si dudo antes de hacer algo, entonces no es mi camino. Porque la dualidad no se produce cuando se vive en consecuencia.

No sé. Tiene razón, supongo. Me paso el día imaginando escenarios perfectos, es verdad, pero de todas formas siempre hay algo que hace que se pierda la magia y ya no quiera nada. Hasta en mi imaginación.

Soñé que tenía que jugar en un partido de fútbol.
Desde el lunes, soy toda una profesora y me encanta.
Voy a salir a leer al sol.

domingo, abril 23, 2006

qué estás buscando

Destinada a la soledad.

Cuando era un poco más chica, siempre escribía que no lograba entender por qué mi vida amorosa estaba destinada al fracaso. Y me gustaba sentirme un poco Consuelo Aldunate, y copiar esa frase maestra "being single is an important fashion statement", y ver películas rosadas los catorce de febrero.

Dicen que lo que pasa es que vivo un eterno romance de fantasía. Que un príncipe azul, nunca. Que aprenda de una vez.

Pero si me he sentido - y no lo niego - tan cerca del cielo con alguien, por qué no esperar hasta que pase de nuevo. Por qué no seguir creyendo, por qué ese aterrizaje forzoso inútil que quizá implique una relación que no sería de verdad porque yo sólo siento lo que siento y no lo que me gustaría.

No sirvo para buscar lo que me conviene.
Prefiero ese frío, este frío, que aparece aunque haga calor.
Y la certeza de que no soy capaz de serme infiel.

sábado, abril 22, 2006

sólo quédate en silencio

Canto todo el día.
Y si estoy triste, canto canciones tristes, obvio.

De hecho, me acuerdo que cuando era chica y salía a comprar con mi papá, él se moría de vergüenza porque yo no me quedaba callada. A mí me da mismo. A veces bailo también, si es que estoy contenta o aburrida de esperar.

Aunque lejos lo mejor es ir con el mp3 de la Chica, la misma canción millones de veces y sin escucharme yo a mí, por lo fuerte de la música. Me da risa cuando alguien me mira mucho. Por lo general no pasa. La gente se ríe y nos saludamos y a veces, en la micro por ejemplo, terminamos conversando de la vida un rato.

Ese afán de musicalizarlo todo.
Y con canciones malas, más encima.
Tomé desayuno en Starbucks con la Siri y lo pasé muy bien.

viernes, abril 21, 2006

just be

Me gané un Baileys.

Fuimos con Christian al Mosaicafé de la rotonda, jugué en una ruletita con un promotor muy simpático que parecía siempre haber querido ser argentino y, justo al lado del sigue participando, gané.

Soy una mujer feliz que come chocolate.
Y, esta vez, no lo necesito.
Aunque no tuviera chocolate, sería una mujer feliz igual.

jueves, abril 20, 2006

muñeca de trapo

¿La verdad?

Tengo ganas de muchos días como hoy, en pijama desde las dos de la tarde frente a una película, sola, tomando mate mientras releo otra vez mis cuadernos de cuando era un poco más chica y pensaba lo mismo que ahora.

Me hace falta escribir más. Me hace falta un taller de teatro, un curso de literatura, una clase de filosofía, cualquiera de esos lugares donde personas que saben más que yo me obligan a pensar en cosas que de verdad me apasionan.

Siento que, de tanto ahora y de tanto cumplir, se me olvida lo que es mío.

Los sueños que no tienen límites.
La vida que se vive desde los días de magia.
La libertad de ser quien soy y nadie más.

martes, abril 18, 2006

quieren dinero

Mi hermana es una loca obsesiva que ama messenger y casi no me deja usar mi computador en mi pieza. Filo.

Después de dos noches durmiendo poco y respirando y comiendo datos sobre la pobreza, terminé mi monografía de Información. Antes de escribirla, sabía que había desigualdad en Chile, pero no tanto como que la diferencia es de treinta y seis veces entre quienes ganan más y quienes tienen menos.

No sabía que hay casi un millón de indigentes, que no alcanzan a tener suficiente dinero para comer todos los días. Ni que la línea que divide la pobreza de la abundancia se traza en poco más de cuarenta y tres mil pesos, donde caben más de dos millones de personas. Tampoco que si esa línea mágica divisoria se aumentara a sesenta mil per cápita al mes, el treinta y cinco por ciento del país sería pobre. Ni que mantener el IVA en un 19% hace que el gobierno gane, además de lo que invertirá en pensiones, 420 millones de dólares.

El mundo me sobrepasa a veces.
Casi siempre.
Y me siento tan pequeña y tan lejos y tan cerca de todo.

lunes, abril 17, 2006

holy weekend

Ocho mil chocolates, y no exagero tanto.

Acabo de pasar un fin de semana precioso. Los retiros de La Anunciación siempre hacen que me encuentre con partes de mí que no había alcanzado a conocer antes.

Lloré un montón, por suerte, me hacía falta.
Escribí cuatro páginas de mi cuaderno.
Monitoreé dos grupos de conversación y hablamos de la vida y me sentí muy a gusto siendo cristiana, aunque no católica como expliqué varias veces antes de contar la historia de Perséfone o de sugerir lecturas de tarot y carta astral.

Jesús resucitó y yo también.
Comprendo mi abismo ahora.
Agradezco al cielo los días que me regaló.
Y espero una llamada de teléfono.

jueves, abril 13, 2006

mutismo selectivo

Aunque a veces pido a gritos cariño, no soy capaz de quedarme con lo que se me ofrece, e insisto en recibir lo que quiero.

Fui a ver 'La sagrada familia'. El cine casi vacío, hora de almuerzo para la mayoría de la gente y qué buena película. Como siempre que algo me gusta mucho, caminé sin palabras hasta mi casa con un vaso de café cargado, sin azúcar.

Me encanta que haga frío. Siempre me siento más cerca de mí en invierno.

Ayer encontré en 'Mujeres que corren con los lobos' la frase perfecta de mi estado actual. En esta etapa, lo que más siente una mujer es tedio. No sabe lo que quiere y le atribuye ese nerviosismo eterno a cualquier cosa que le falta. Pero, a la vez, sabe que está avanzando. Como dijeron hoy en la película, esperar no es detenerse, sino prepararse para algo más.

Jueves Santo.
En un ratito más, tengo retiro.
Me hace falta un tiempo sola con Dios.

miércoles, abril 12, 2006

aún hay algo

Un gato negro acaba de tratar de entrar a mi casa pero no lo dejamos y la Toña se dio mil vueltas para no tener mala suerte. Terminó mareada. Obvio.

Mientras iba camino a la casa de Jose, a las nueve cuarenta y siete de la mañana, mi micro atropelló a una señora. Casi lloro. Estaba let go de fondo, y desde la ventana sólo alcanzaba a ver sus zapatos con taco. Una vez abajo, el charquito de sangre y sus anteojos puestos. Estaba despierta. No sé qué pasó después.

Sebastián está pololeando. Víctor se va a vivir con su novia. Le leí el tarot a Jose y me regaló el compact que escucho mientras escribo. Almorcé con Pablo y su papá, los dos personas increíbles, cobré mi cheque y otro Sebastián me invitó a comer al Piola. Lo pasé muy bien. Me encanta que me inviten.

Con la Toña íbamos a carretiar pero nos arrepentimos.
Tengo sueño y estoy un poco triste.
Que el destino se decida y deje que me enamore en paz.

lunes, abril 10, 2006

baila morena

La vida es un paréntesis.

Por algún motivo, hace varios días que me siento viviendo fuera de mí. No sé cómo explicarlo. Es como si estuviera ocupando un cuerpo prestado, un ratito, antes de seguir mi camino en un mundo sin formas. Me cuesta entender el concepto de levantarse para trabajar, o estudiar, o lo que corresponda, porque yo no me levanto para eso.

Creo que me levanto para ver qué me regala el día. Para sentir cosas. Para pensar. Para disfrutar mi paso por la tierra, porque es rico tener frío y darme cuenta de que estoy viva. Que no sólo existo en espíritu, también en cuerpo. Que soy fondo y forma. Me encanta esa capacidad que tiene el corazón de latir sin que se lo pida. No dejan de asombrarme los mil sabores distintos del mismo chocolate en diferentes momentos, los mensajes escondidos de las películas que repito, la cantidad de personas por descubrir que viajan a mi lado en la micro, las mariposas blancas que me encuentro siempre cuando estoy contenta.

Anoche perdí mis zapatillas y estaba segura que un asesino esperaba escondido a que me diera cuenta que se las había llevado para demostrarme que podía entrar a mi pieza sin que me diera cuenta, pero resultó que las había dejado en la terraza. Para variar.

Hace dos días que me duele la cabeza, aunque no he peleado con nadie.
Bailé 'pásame la botella' todo el rato antes de ir a la universidad.
Me acabo de soltar el pelo y tengo los labios un poco partidos.

sábado, abril 08, 2006

día lejano

Escucho Sozihno mil veces.
Tengo la ventana abierta y es casi de noche.

No sé qué escribir. Qué ñoña. Como si porque fuera mi post número cien, se tratara de un aniversario, o un cambio de etapa, algo medio simbólico. Es que siento eso, igual. Escribo en un momento en que las dudas se aclaran y los sueños reaparecen.

Ha pasado mucho desde octubre. Han pasado personas, lugares, romances a medias, desencuentros, conversaciones finales, cartas de renuncia, certezas, crisis, búsquedas.

Cinco meses de letras con música de fondo, a ver si yo misma me entiendo. Y esos comentarios perfectos de personas que no conozco, aparecen de la nada y siempre me aclaran un poco.

Me gusta este espacio.
Mi profesor dijo que era una escritora frustrada.
Quizás tiene algo de razón.

jueves, abril 06, 2006

in the waiting line

Este es mi post número noventa y nueve.
Igual va a ser emocionante cuando lleve cien.

Ayer trabajé por última vez en Piola y fue lindo. Después de una conversación de media hora con el dueño, salí con la certeza de lo correcto. Gabriel me apoyó, me entendió, y me pidió disculpas por un arrebato que le podría haber tocado escuchar a cualquiera. No así Gonzalo, el jefe histérico por quien ahora soy una cesante más. Filo. Cosas que pasan.

Vengo llegando de ver 'Fuga' con la Toña. Me gustó. Mucho. También fuimos a tomar helados al Bravíssimo y café gratis al Starbucks. Un mago hizo desaparecer una caja de cartas. Fue lo mejor.

Revisé el guión con Marcos en ese café que siempre había querido conocer, en la plaza frente al metro Salvador. Sacamos un par de escenas y arreglamos otras. Casi listo el casting. A ver si me convierto en directora al fin.

Anoche carretiamos y bailé reggaeton todo el rato.
Me quedé dormida en la mañana y no llegué a Información.
Mañana tengo mi último taller tele.

martes, abril 04, 2006

vuelve a ti

Renuncié.

El sábado tuve una pelea con uno de los jefes y uno de los dueños, y, como protesta pasiva ante la manera que tienen los dos de tratar a la gente, me voy. Es que no creo en las relaciones de trabajo donde no se respeta a cada uno. Y aunque a mi otro jefe lo amo porque es lo mejor de la vida, no puedo ser parte de un lugar en que el dueño se pone de pie al lado mío para hablarme acerca de lo imbéciles que son sus garzones. Ni tampoco tolero que se me levante la voz.

Una sola vez se me falta el respeto. Y si tengo que renunciar mil veces por eso, lo haré. No dudo que Dios provee siempre.

Filo, sigo el camino de mi alma y no siento dualidad.
Tampoco intento ya que la voluntad le gane a las certezas.
Estoy tranquila, contenta, en paz.
Y segura de que se acaba una etapa de pruebas finales.

domingo, abril 02, 2006

otra vez

Nostalgia de algo que nunca he tenido.

Ganas de despertar al lado de alguien y contarle qué soñé, de un compañero de viaje que me revolucione las hormonas, de un amigo que además sea amor y cómplice y todo.

Me gusta el rumbo que sigue mi vida sin rumbo.
Me gusta saber que cuando me hagan callar, voy a hablar más fuerte.
Me gusta mirar por la ventana de la micro y ver que una persona camina disfrazada de rey.

Pero tengo esa nostalgia absurda de los domingos en la tarde, ahora que empieza a hacer frío. Quiero tomar un chocolate abrazada, repetir alguna película y besar a alguien sin pensar.

Me siento sola.
Hace tiempo no me pasaba.

sábado, abril 01, 2006

waking up

En la casa de la Toña.

Anoche carretiamos con un amaretto sour medio mal hecho por mí. Es que la Toña quiso ponerle azúcar. Filo. Estaba rico igual. También comimos pie de limón y pie de chocolate con manjar, y a las cinco y media de la mañana pensamos que un asesino estaba escondido en el clóset, pero no. La Mili en un acto de heroismo desenfrenado abrió la puerta y la persona era una almohada. Eso pasó después de que la gente que había venido y que no veía hace mucho tiempo, ya se había ido.

Tengo ese dolor de guata de cuando va a pasar algo bueno.
Quizás me enamore o qué sé yo.
Estoy contenta.