Escribir siempre ha sido mi catarsis.
Hoy, es mi minuto de descanso.
Me gustan las frases cortas y los puntos seguidos y las historias cotidianas. En cambio odio las frases sustantivas yuxtapuestas que idolatraban mis profesores de colegio. Me encanta enumerar. Decir que vivimos tantas noches, risas, días, lunas y soles. O que mis cartas de tarot preferidas son la maga, la loca, el as de bastos y la vieja sabia. La vida es un conjunto de enumeraciones, al final.
Desde que estoy en la revista, quizá he dejado de escribir un poco. No sólo en mi blog. En mis cuadernos, también, y en las paredes y en mi cabeza. Pero en el fondo no olvido que esto es lo que de verdad es mío. Quiero ser glamorosa algún día, claro, y aprender a caminar con zapatos con taco y vestirme a la moda porque vi the devil wears prada y se veían todas tan bien. Pero no es lo que más quiero.
Lo que más quiero es llegar a ese día donde nada importe en realidad y yo pueda sentarme frente a un computador lleno de páginas en blanco y decir de acá no me levanto hasta que lo haya contado todo.
Y contarlo.
jueves, enero 10, 2008
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6 comentarios:
Que rico es ver gente que escribe con tanta pasion como tu lo haces.
Ya abran tiempos con mas tiempo para escribir.
Besitos
escelente! ojala llegué ese día...
cariños
bye
jajajaja ese escelente es aproposito eehhh
Que blog tan entrete!
Saludos!
te confieso que te leo comùnmente y que mi carta es el ermitaño, pero la soledad de la carta me asusta.
ahh es que a mi me encantan tus post
adoro tu redaccion como diria mi antigua profe
ya besitos
que tenga linda semana
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